Más importante que la carga genética o el poder de influencia al que uno se expone, que comienza a ser un factor clave en la vida de muchas personas, es CÓMO VIVES TU DÍA A DÍA, cuánto te conoces a tí mismo, te autoobedeces y quieres APRENDER.
Esto cambia por completo la creencia que aprendiste en ciencias naturales acerca de la importancia que tienen los genes de Mendel sobre el comportamiento humano.
Poner de relieve que las circunstancias, tu interacción social y las funciones que desempeñas en tu vida influyen en tu cerebro activando o no determinados genes de expresión rápida, supone una idea novedosa y muy interesante para tu consciente que Rossi ha sabido plasmar en sus investigaciones (Rossi, 2002; Rossi & Rossi, 2008).
Ernest L. Rossi es uno de los hipnoterapeutas de orientación Ericksoniana más importantes del mundo y en sus investigaciones habla de cómo nuestro ambiente psicosocial interactúa con nuestra expresión génica.
Prácticas tan cotidianas como visitar una galería de arte, asistir a una obra de teatro, ir al ballet o tocar un instrumento musical, son costumbres que forman conexiones neuronales nuevas e influyen sobre TU PLASTICIDAD NEURONAL consiguiendo que tu cerebro sea particular al del resto de personas.
Te resultará fácil llegados a este punto identificar los fenómenos que experimentas cuando estás disfrutando de este tipo de actividades. Eres un artista porque a la vez que disfrutas de la inspiración de otras personas y de sus creaciones, TE CONVIERTEN también EN EL ARTÍFICE de tu red neuronal.
Cuando observas obras de arte, fotografías, vídeos, películas, tu mente lo que recibe es información sin significado aparente, perspectivas diferentes a las que estás acostumbrado/a y que tu mente inconsciente recibe directamente porque el filtro de la lógica se hace menos presente cuando no entiendes algo. Puedes experimentar esta sensación de confusión después de haber leído este párrafo. De hecho, mientras te detienes en lo que te estoy describiendo, puede que tu mente te esté pidiendo leer de nuevo todo el párrafo para encontrar cierta coherencia o lógica. Bien, así funcionamos en nuestro día, y lo que no encaja, lo tiramos a la papelera de reciclaje creyendo que de esta forma desaparecerá. Sin embargo, esta información queda registrada en la gran biblioteca que posees. Puedes incluso sorprenderte tu capacidad para ser arquitecto/a, artista y bibliotecario/a. Las tareas de los bibliotecarios son múltiples, como adquirir nuevos materiales, catalogarlos y clasificarlos, desarrollar colecciones, descartar lo obsoleto, establecer las normas de funcionamiento de tus centros de información neuronal, etc.
¿Qué tienen en común estas tres profesiones tan innatas en tí? LA INSPIRACIÓN. UN RECURSO FABULOSO, UN EJERCICIO DE PLASTICIDAD CEREBRAL, un entrenamiento que haces involuntariamente cuando te abres a percepciones desconocidas, abstractas, donde focalizas tu atención en lo que a primera vista carece de significado.
La psicoterapia avanzada que pongo en práctica es sin duda un gran fenómeno hipnótico CON GRANDES BENEFICIOS PSICOLÓGICOS que desarrollan tu neuroplasticidad.
El ejercicio físico también es positivo y necesario para el mantenimiento de la salud, y esto nos lo han enseñado desde pequeños en la escuela. Lo recomendable sería incorporar alguna actividad artística como pintar, cantar, bailar, fotografiar o disfrutar de un libro de arte en tu tiempo libre, incluyendo si pudieras estos tres pasos de reflexión al finalizar el día:
- Reconoce aquello que te ha hecho sentir bien durante el día.
- Detecta las cosas que te desestabilizaron/incomodaron en el día.
- Estate abierto a aprender de las personas que te rodean.
Puedes reconocer de modo reflejo una voz en tu interior que te dice: “el éxito consiste en empezar a activar tu propia historia una vez te hayas quitado las barreras y creencias que te han hecho estar tens@ y disperso”. LA SALUD ES RECONOCERTE sin ningún pero, CON LA CAPACIDAD DE CAMBIO y apertura HACIA el aprendizaje y el disfrute de la belleza que te rodea y que aparece ante ti cada día con cada amanecer y atardecer. La salud cerebral reside en vivir sin que te compares con el de al lado. Consiste en disfrutar de lo que haces, compartir con aquellos que te hacen sentir bien y a los que quieres, ayuda a enfocar tu mente para aprender aquello que sabes que te acercará más a dónde quieres llegar.
Posiblemente te hayas educado conforme a los convencionalismos de una cultura, colegios, familia cuyas normas tachaban de peligroso o raro todo lo que se salía de los límites establecidos, factor de gran peso inhibidor de tu creatividad y acceso a nuevas experiencias enriquecedoras, como he comentado anteriormente.
No quiero decir con esto que las normas sociales, familiares y escolares no sean útiles ni que la genética no tenga importancia. Son muy útiles, importantes y establecen una dirección de descubrimientos, convivencia y respeto necesarios.
Sin embargo, las personas necesitamos cambiar nuestra forma de pensar, de saborear la vida y de percibir nuestro entorno con los años. Incorporar nuevas perspectivas para abordar proyectos vitales y laborales, nuevos caminos de comunicación que nos acerquen más a lo que realmente somos, no a lo que nos dijeron que fuésemos..
¡Es importante que mantengas engrasado tu cerebro para saber diferenciar estos matices que a veces se tornan tan sutiles!.
Lo insano, señores, es mantenerse en los mismos fundamentos y creencias que provocan a una cierta edad esa incomodidad ante los cambios. Hazte esta pregunta ¿qué ocurre cuando quieres mantener tus creencias y la sensación de bienestar actual y sin embargo crees esperar un futuro diferente y cada vez mejor? Tal vez te hayas acomodado en exceso y necesites incorporar algo nuevo.
Esta incoherencia interna de no querer tomar riesgos o no hacer esfuerzos y esperar que la vida te solucione las papeletas, es una idea poco lógica y peligrosa, ya que aumenta el grado de infelicidad de miles de personas.
¡Se un poco rebelde! No te creas todo lo que te dicen o enseñan; concédete experimentar cada día algo nuevo, ya sea contrastando una idea que surgió de un debate con unos colegas, cocinando una receta totalmente desconocida o yendo a un museo. Suponen caminos neuronales distintos y rutas que generarán en tu cerebro una conexión flexible-creativa.
Te invito a que ejercites los circuitos de tus sueños creando una huella neuronal que con la repetición, consiga acceder a tus objetivos por atípicos o lejanos que te resulten. Y recuerda, el tiempo es una variable subjetiva que se puede manipular. Te pongo un ejemplo ¿Cuántos minutos crees que han pasado desde que comenzaste a leer el libro hoy? Cuando estás entretenido y tu mente se absorbe en alguna actividad, la percepción del tiempo también cambia, así que aquello que ves lejano todavía en tu vida, no tiene por qué serlo en realidad.
No tienes que dar la vuelta al mundo o hacer algo extraordinario para ser feliz. Son actividades muy interesantes, desde luego; sin embargo, La Habitación Propia de la mano de María Saavedra quiere proponerte ejercicios cotidianos y muy sencillos que solo requieren de cierta reflexión por tu parte, porque LA FELICIDAD SÓLO PIDE QUE SAQUES LO MEJOR DE TI MISMO/A y disfrutes de los pequeños detalles compartiéndolos con los que quieres.
¿Te animas a compartir este artículo en tus redes? ¿ Y a probar este tipo de terapia experiencial? pide cita aquí: Contacto – María Saavedra (mariasaavedrapsicologa.com)
Buenísimo Maria!!
Gracias Cristina!